20 septiembre 2006

¿Es... son? - XVII

Viejo amigo, por fin me atrevo a hablar de ti como mereces. Tiempo ha que te conozco, pero hasta ahora no había sido consciente de tu valor, de lo que realmente significas.

Cuántos momentos hemos pasado juntos, cuántas situaciones hemos compartido, cuántas decisiones me has ayudado a tomar. Cómo me he perdido en ti, en tu blancura, próximo o lejano, en un punto o en toda tu extensión, cómo hemos soñado historias y cuentos y cómo nos hemos anticipado a veces a los acontecimientos.

En ti, sí, en ti he encontrado sosiego, paz, armonía, descanso, entretenimiento, consejo, decisión, consuelo, compañía. Me has mostrado como soy, siempre has sido sincero, siempre escuchante, comprensivo, paciente. Sí, ya no me avergüenzo, ahora, observándote te valoro como realmente te mereces.

06 septiembre 2006

Hace tanto tiempo - VI

Continuo el relato que empezó Terminus. Los capítulos anteriores de "Hace tanto tiempo" están en:
I, por Terminus
II, por Dark
III, por Morrigan
IV, por Aiyana
V, por Carlos (Sr. Chow)

...

- Me tiene preocupado el paciente de la 96. Sus ondas del sueño son extrañas y siguen un patrón que nunca había visto antes. Observa el electro que acabo de hacerle.

- Pues recopila toda la información y lo llevas al congreso de 2007.

- Buena idea, pero para documentarlo mejor necesitaría que me ayudara un lingüista, porque esa jerga no puede ser sólo fruto de su delirio. Es curioso, utiliza palabras que no conozco, pero las entiendo perfectamente. También deberíamos consultar a un especialista en criptología, a ver qué nos puede decir sobre los signos que tiene tatuados en la frente.

- Es sorprendente esa coquetería cabezona de que nació en el 78, es lo único en lo que parece no dudar. Y la historia de Marta, sí, y cómo lo encontraron casi ahogado en la piscina de esa casa abandonada. Demasiadas cosas, y lo único que lo explica todo es su cuadro psicótico y un intento de suicidio.
Pero está fuera de los patrones normales, no sé, algo me dice que hay más.


¿Había ido a casa...?
¿Dónde estaba la sala de los hombres autómatas?
Recordaba un dolor sordo, un ruido metálico, una luz brillante y luego el calor. El frío penetrante y la humedad, el moho y ese techo blanco y acolchado. Qué sensación tan confusa. Debía salir, Marta le estaba esperando. Por fin volverían a encontrarse...

La puerta de la habitación se abrió y allí estaba, vestida de blanco, deslumbrante. Una sonrisa, su sonrisa de siempre y sus ojos, sus intensos, burlones y profundos ojos azules. Llevaba una bandeja con jeringuillas.

- ¿Cómo está hoy mi gorrión?

...

Terminus, remata.

27 agosto 2006

¿Es... son? - XVI

Ninguno es igual a otro, todos y cada uno son diferentes, el problema es que se han convertido en algo tan normal, en algo tan cotidiano, que van y vienen y prácticamente pasan desapercibidos.

Tengo en mi memoria la primera vez que fui consciente de lo que era. Yo debía tener tres años y fue en casa de mis tíos. Ese día pensé: andá, si esto es algo que sirve de vínculo que obtengo porque soy yo y lo reparto porque formo parte de algo. En ese momento para mí pasó a tener un valor que hoy en día vuelve a retomar, tras una época en que era una mercancía casi de saldo (más que de saldo, de regalo sin valor).

Hoy recuerdo algunos memorables, y soy capaz de tasar en su justa medida cada uno de ellos: los despreocupados, los de compromiso, los verdaderos, los amistosos, los profundos, los largos, los cortos, los esperados, los irritantes, los regalados, los comprados, los inocentes. Casi se podría adjetivar cada uno y siempre se me olvidaría algo. Quizás a partir de ahora me vuelva coleccionista.

21 agosto 2006

¿Es... son? - XV

Es así, todos los años lo mismo.

Cómo empieza por un rosa fuerte y va pasando al bermellón, cómo muta y de repente se transforma en el pasatiempo de algunos, que van desnudando como si fuera el deshojar de una margarita, o quizás de un crisantemo en recuerdo de lo que fue.

La preocupación de otros que desesperadamente y con vanos esfuerzos las más de las veces luchan para conservarlo. O el arrepentimiento de alguien que siempre piensa lo mismo: que la próxima vez lo hará mejor, paulatinamente, con cabeza, sin prisas.

Pero siempre es igual, nunca aprendemos. Y una vez tras otra, un año tras otro, hay momentos en los que a tu pesar tienes que huir de los amigos efusivos.

18 julio 2006

¿Es... son? - XIV

Sobre lo que voy a tratar quizás sea un experto de talla internacional, pues vengo observando éstos desde mi más tierna infancia, siendo el primer objeto de mi atención en muchas ocasiones.

Mi ideal es alargado, fino, que progresivamente y en un ángulo algo cerrado va ensanchándose suavemente, siguiendo un contorno ovoide que poco a poco va convirtiéndose en circular por su parte superior y romboidal por su inferior, con los ángulos redondeados sutilmente.

Sobre estas formas para mí muy estéticas hay múltiples variantes que dicen mucho de sus propietarios.

¿Es... son? - XII + I

Por motivos ajenos a la dirección se pasa directamente al siguiente. ¡Sale bichooo!

¿Es... son? - XII

Desde lo más hondo, desde dentro, se sabe y no se sabe, es profundo, somero. De dónde viene se explica, o quizás es inexplicable.

Lo tienes, te lo dan, va y viene, se inventa, es irresistible, te hace sufrir, te mantiene vivo, te lleva a la muerte. Luchas, te dejas llevar, lo olvidas, vuelve de lejos o de cerca, cambia y luego vuelve a cambiar.

Te acompaña para siempre o es efímero, firme, antojadizo, voluble. Consciente, inconfesable, que se hace notar, se esconde.

Se alimenta, te consume, te da fuerzas, te deja indiferente. Te aturde, te mejora, te ciega, te sujeta, te precipita.

Te ensalza, te enorgullece, te subyuga, te envilece...

22 abril 2006

¿Es... son? - XI

Estoy delante y me dispongo a entrar. Me veo empujado por la multitud e irrumpo en una sala con forma de cúpula, estoy relajado y me dejo llevar.

En el suelo hay una trampilla circular que tiene una puerta de tres hojas, de repente se ha abierto y nos ha hecho caer a todos dentro de una habitación que parece una caverna en forma de nave, sus paredes están llenas de surcos alargados e irregulares, hay estalactitas o estalacmitas pues ya he perdido la sensación de situación y de ellas salen las cuerdas que se unen al mecanismo de la trampilla para impedir que ésta se abra hacia el otro lado.

En un gran hueco de una de las paredes hay otra abertura tapada por tres cortinas que se abren y nos invitan a pasar. Sin terminar de ver la casa nos han echado.

Este camino por el cual discurrimos cada vez más lentamente no lo reconozco, a todos nos ha cambiado la cara. Cada vez más despacio volvemos a esa casa y entramos en la habitacion en forma de cúpula, pero no parece la misma. La trampilla del suelo sólo tiene dos hojas y la cueva con forma de barco es igual pero algo más pequeña.

Bruscamente nos vuelven a echar a través de las cortinas, esta vez con una terrible fuerza.

19 abril 2006

De las relaciones.

Yo creo que la relación entre dos personas debería llamarse interrelación, pues en ella hay un sinfín de mensajes circulando en todas direcciones.

¿Cuál es la razón que normalmente hace que dos personas estén juntas?. En un principio el móvil sexual, la atracción. Esto es muy importante, pero una relación profunda y duradera no se puede mantener sólo a base de sexo, sería agotador, salvo que de antemano sea una relación tan sincera que de forma bilateral se acceda a ello y además se comprenda que no se trata de una relación exclusiva.

A continuación viene el conocimiento del contrario, esta fase suele ser en donde fracasan la mayoría de las relaciones, pues la gente que al principio sólo muestra lo mejor de sí misma, cuando se relaja y empieza a enseñar lo que queda, suele desilusionar. Esto ocurre en las dos direcciones, pero la mayoría de las veces de forma desincronizada. Si sucediera a la vez sería catastrófico, y sólo salvable con una relación sexual excepcional.

Si se supera este momento, lo siguiente es comenzar a tener un plan conjunto para el futuro. Desgraciadamente la mayoría de las personas no sabemos lo que queremos y nos dejamos guiar por patrones preestablecidos que nos machacan hasta la saciedad: me conozco, me acuesto, me ilusiono, me conozco de verdad, me desilusiono, me voy de viaje, me vuelvo a ilusionar, me caso, me hipoteco, soporto un trabajo que no me suele gustar, me compro un coche carísimo, no quiero pensar, me compro un apartamento en la playa, trabajo más, pongo alicientes en mi vida, tengo hijos, uno, dos, tres, ya no sé quién soy, me lo empiezo a plantear, después de todo ya no puedo cambiar mi opción, a joderse tocan, me compro cada vez más cosas para ver si esto me hace feliz, me estoy engañando, me sigo engañando, termino engañándome. Y todo empezó por echar un polvo. Bueno, quizás esto sea un tanto exagerado pero yo lo he visto en muchas ocasiones.

Una vez que más o menos se han hecho planes conjuntos, desgraciadamente suele haber algunos aspectos que no agradan demasiado. Éste es otro punto de inflexión en una relación: esos aspectos cuando son percibidos suelen intentar ser cambiados, lo cual constituye un gran error, la gente no cambia por amor, un león siempre es un león aunque esté amaestrado, la gente transige por amor o porque quiere conseguir algo o porque no quiere perderlo, pero mantener un estado de transigencia perpetuo y cada vez más exigente, es la mejor manera de desestructurarse como individuo. Cuando ha de existir esta transigencia debe ser bilateral y no muy exigente, pues ésta llega del miedo a la soledad, que al fin y al cabo sólo es miedo de encontrarse con uno mismo, mirarse, no reconocerse y no saber como volver a empezar.

Solución

18 abril 2006

¿Es... son? - X

Va, viene, se detiene, queda suspendida en el aire como si nada, pues parece que nada la sustenta, hasta que se para sobre algo. Brilla casi con luz propia y de colores que cambian según la luz. Sube, baja, se desplaza trazando geometría en el espacio.

Me evoca tardes de verano, de paellas en la leña, de rumor de agua...

La solución

Un par de amados zapatos viejos, de los que nunca te gustaría deshacerte.

Acertó Deyector.

17 abril 2006

¿Es... son? - IX

Estaba a punto de bostezar, él antes que su hermano, que por alguna extraña razón se mantenía en mucha mejor condición. Parecía más terso, más entero, aunque ambos habían recibido el mismo tratamiento, aunque sin querer yo los había diferenciado en sus funciones y a cada uno le había exigido cosas distintas.

Quizás ahora ya fuera tarde, posiblemente ya no habría solución para ninguno de los dos, pero aún así yo me resistía a despedirme de ellos, pues estábamos juntos desde hacía ya unos cuantos años y habíamos terminado por compenetrarnos casi totalmente.

Ahora la decisión dependía de la opinión del especialista. Yo me sentía algo culpable porque en más de una ocasión no les había dado lo que necesitaban, aunque ellos siempre respondieran...

10 abril 2006

¿Es... son? - VIII

A veces cuesta, otras veces espontáneamente acude, no siempre te sientes orgulloso, pero siempre lo intentas. Puede parecer lo que no es, y casi todo en torno suyo, a veces malicia, otras inocencia, nos lleva por caminos que suelen terminar en lugares alucinantes en la verdadera acepción de la palabra.

Sirve como un espejo, una cámara oculta que te enseña bastante de los demás. Es ligera o ardua, es sesuda, espontánea, pero siempre quiere agradar.

¡Hale hop, je suis là!.

No, no me he ido, he estado agazapado, he estado harto, me he sentido triste y decepcionado, he analizado, buscado, intentado comprender, perdido, ahíto, vacío, lleno, hastiado. Al final me guardo mis conclusiones. Pero lo más importante es que os he echado de menos y desde lejos he aprendido a valorar a mucha gente de esta blogosfera. Para bien o para mal heme aquí de nuevo.
Ataos los machos.

Adivinanza:

Cuando el tiempo se nos troca, veréis si queréis mirar un caballero cantar, sin tener dientes ni boca.

08 marzo 2006

Mi Señora Doña

Hoy me siento triste, he llegado despues de haber faltado unos días, he empezado a pasar lista y me he encontrado con que de repente faltaba alguien, alguien para mí muy importante.

Como ya dije en un post, yo comencé este blog leyendo las historias de Nepomuk. Me gustó su frescura, su ironía, su sentido del humor fino, capaz de reírse de todos pero de él mismo el primero. Cuando empecé a profundizar en este mundo conocí a más gente, muy interesante, con sus cosas buenas y sus cosas menos buenas, con sus problemas cotidianos sencillos y con otros no tan sencillos y a veces muy dolorosos. La mayoría de las veces me sorprendí, otras me sentí contento, algunas me molesté, pero en todas vi algo, vi humanidad, ganas de comunicación. Como en una familia estuve en momentos buenos y también malos, en unos participé y en otros pasé de largo, unos me importaron sinceramente y en otros simplemente hice acto de presencia para que constara que estaba allí.

Me vais a perdonar, pero una de las personas por las que desde un principio sentí debilidad fue por mi señora Doña Eride. Y ahora se va, no sé dónde, cómo, ni por qué. No sé si para siempre o sólo emprende un pequeño viaje para poder luego volver. Sea como sea quiero aquí despedirme, decirle que sin ella esto no es lo mismo, y desearle lo mejor.

Buen viaje.

03 marzo 2006

¿Es... son? - VII

Fue emocionante la primera vez. No sabía cómo había que hacerlo. Me habían dicho que tenía que estar a oscuras, en un lugar cálido y que había que humedecerlo, aunque sin pasarse. Yo estaba dispuesto. Puse todo lo necesario y tras una puerta, junto a un radiador, lo hice.

En mi imaginación podía ver todo el proceso transcurriendo a toda velocidad. Pero la realidad era otra: el tiempo no se correspondía. Por eso casi llegué a olvidarlo, no soy propenso a la obsesión.

Y al fin, un día, sin que yo lo esperara, apareció. Surgió como de la nada y fue como tenía que ser. Algo parecido a un milagro, algo íntimo, quizás repetible pero no igual.

28 febrero 2006

Una de refranes

Os propongo que pongáis el refrán o refranes que se os hayan cumplido con mayor frecuencia o que más os gusten. Ahí va el mío:

-La justicia de enero es rigurosa. La de febrero, ya será otra cosa.


27 febrero 2006

¿Es... son? - VI

Siempre lo miré fascinado, turbado, como si estuviera a punto de descubrir un tesoro oculto. Cuando fue lo primero que vi, dio alas a mi imaginación para ver el resto, y si mi primera visión me satisfizo, siempre se impuso a lo demás, aunque no se correspondiera a lo que yo había imaginado, ya fuera por más o por menos bello.

Como de una casi recta, el perfil de su contorno en su vista posterior, en ocasiones enmarcada y oculta, se va suavizando hacia un valle a veces horizontal, otras con una ligera inclinación. Cómo después se contornea en una voluta sensual casi esférica.

Cómo su color, su brillo satinado, su tacto, pueden envolverme y hacerme ensoñar con atardeceres de verano y fragancia de mar.

SOLUCIÓN:

17 febrero 2006

Mi impresión de las mujeres

Como ya dije, a la edad de tres años ya había comenzado el colegio y ya había tenido dos experiencias clave con las mujeres.

A todo esto, justo enfrente de mi piso se acababa de mudar una familia compuesta por los padres, un hijo y dos hijas. Del hijo no guardo memoria pero de las hijas sí. Repentinamente, dos féminas se habían colocado justo enfrente de mi vida a una taza de azúcar de distancia.

La que más me atraía tenía unos dieciseis años y yo entonces no entendía por qué pasaba de mí de una forma completamente bestial, aunque ya mi corazoncito empezaba a vislumbrar que entre los objetivos de una adolescente con bastantes pretensiones, no se encontraba el de hacerle caso a un niño de tres años que la miraba como si estuviese muy enfermo del tiroides, con los ojos muy abiertos y desorbitados.

La otra hermana tenía más o menos mi edad pero a mí me espeluznaba. Portaba a la sazón unos vestidos cortos casi a nivel de la sínfisis púbica, con unas braguitas de ganchillo subidas por encima del ombligo que siempre estaban manchadas de negro en la zona de asiento. Además llevaba el pelo recogido con hierros por todos los lados y las uñas pintadas a retazos de un color rojo vivo.

Tanto la hermana mayor que siempre estaba de mal humor, como la pequeña que sólo se holgaba en hacerse obedecer por mí, jamás sonreían. Tenían el aspecto de esos profesionales que se toman muy en serio su cometido. Con ellas, además de estas apreciaciones, aprendí que las chicas olían diferente, entre un olor a colonia de niño y un olor dulzón muy típico que se quedó grabado en mi recuerdo para siempre...

Continuará...

11 febrero 2006

Mi visión de las mujeres

Lo primero que he de decir es que yo no tengo hermanas.

Mi primer encuentro con una chica, que yo recuerde, fue cuando tenía dos años. Ella quiso besarme y yo, claro, completamente acojonado de que otro ser se abalanzara sobre mí sin previo aviso y con los labios por delante, la aparté de un empujón. Ella, mucho más fuerte, hábil y decidida que yo, terminó inmovilizándome y dándome un mordisco en mi tierno carrillo. Ya os podréis imaginar lo que eso puede llegar a marcar a una criatura, pues muy lejos de ello, eso supuso un reto para mí y esa chica decidida y fuerte sería la pauta para determinar el tipo de mujeres que me gustarían en el futuro (decididas pero no pegonas, ojo, que no soy masoquista).

La siguiente mujer en mi vida fue la señorita B. (no digo su nombre por si me está escuchando y esto le suena). Era mi profesora de jardín de infancia y yo tenía tres años. Fue un amor a primera vista. Tanto la quería que un día que me tenía sentado en sus piernas enseñándome los palotes y yo con unas ganas tremendas de hacer pis, no sé si por el calorcillo, no sé si por no bajarme de su magnífico regazo, por ambas cosas o por algún oscuro motivo que no acierto o no quiero acertar a comprender, me meé encima de ella. Allí mismo sufrí mi primer desengaño y comprendí lo efímera y frágil que resulta la esperanza, y por qué poquita cosa puedes perder a tu amada.

Continuará...

10 febrero 2006

¿Es... son? - V

Te conocí cuando sólo tenia 12 años. Al principio me ponías enfermo pero hacía ver que me gustabas. No quería ser diferente a los demás, aunque seguro que en ellos producías la misma impresión. Poco a poco fuiste entrando en mi vida, acomodándote, convirtiéndote en algo cotidiano y poco a poco en algo imprescindible, deseable. Yo te detestaba porque en el fondo sabía el daño que me causabas. No podía terminar contigo y secretamente albergaba la esperanza de dejarte sin dolor, sin pena, sin necesidad de ti.

Ya han pasado algunos años desde ese día en que tomé la decisión de abandonarte, de no volver a ti nunca más. Tú que te habias convertido en una parte importante de mi vida, que me gobernabas casi en todo momento, que disponías de mi tiempo inexorablemente, sí, te dejé, a pesar de las consecuencias, a pesar de saber que te echaría de menos, que seguiría soñando contigo, que me encontraría solo, desdibujado, enfadado, sin saber qué hacer.

Pero ya no volverías a hacerme daño, no conseguirías dominarme, lo que hice lo hice por mí, lo he pasado mal, pero no me arrepiento.

09 febrero 2006

Yo sólo cumplía órdenes

Obediente siempre a la llamada del deber, pongo manos a la obra para satisfacer, al menos parcialmente, los deseos de mi querida Wendyquerida.

He elegido un fragmento que a mí me marcó especialmente, pertenece al libro "Cuerpos y Almas" de Maxence van der Meersch.

Ni un artículo ni un estudio. Sólo algunas notas dispersas que nadie sentiría la curiosidad de consultar. Ni siquiera un colorante al que dejar su nombre. La parte de la ciencia que correspondió a Norf era la más amarga y negativa: explorar los caminos sin salida posible para que los demás no pierdan el tiempo con ellos. Por otra parte, si acaso había descubierto algunas cosillas útiles y personales, había sido demasiado modesto, demasiado escrupuloso y no había querido publicar nada con precipitación o que no fuese absolutamente cierto, hasta el punto que nadie sabría nunca de su esfuerzo...

He tenido que buscar en un baúl y casi releerme el libro para encontrar este fragmento que leí a los catorce años.

Le paso el meme a Súcubo, a Kilian y a Cirene.

08 febrero 2006

¿Es... son? - IV

Has venido a mí de repente, un fugaz recuerdo de otros tiempos, te has aparecido en el lugar donde viven mis recuerdos. Cómo te vi el primer día, cómo te cogí con cuidado, como si fueras a romperte, cómo fui aprendiendo poco a poco tus más íntimos secretos. Cómo tú, rebelde ante mi torpeza, me ensuciabas y no respondías exactamente a lo que yo esperaba y cómo, al final, después de haberlo dado todo quedabas exhausta, poco a poco dejabas de hacer aquello para lo que habías sido creada.

Recuerdo tu vestido negro, tus formas que se adaptaban casi perfectamente a mi mano, tu sombrero, que al retirarlo dejaba al descubierto esa filigrana de plata y oro tan delicada que era parte de tu esencia.

Cuánto hemos caminado juntos, cuánto hemos subido y bajado en rápida sucesión a veces, otras en insegura, muchas para bien, algunas para lo contrario.

Tú que has sido mi confidente, mi amiga, el vehículo de mi desesperación, de mis desengaños, de mis pensamientos, de mis palabras de amor, de mis mejores deseos y también de los peores, de mi memoria, de mi futuro...

07 febrero 2006

Encuesta sobre juegos y meriendas

Después del post de la nocilla, y viendo que más o menos la gente de esta esfera se mueve o ha movido por parecidos derroteros, me gustaría que me contestaráis, por favor a:

  • ¿Cuáles eran vuestros juegos infantiles preferidos?
  • ¿Cuál vuestra merienda?
  • ¿En qué ha derivado todo eso en la actualidad?

06 febrero 2006

¿Es... son? - III

Cuántos años conociéndote, desde siempre que yo recuerde. Cuántas tardes compartidas, a veces entre los juegos infantiles, otras sin poder dejar de jugar, tú seguías en la mano sobre tu compañero inseparable y a veces caías al suelo, y yo, con inmenso cuidado, retiraba uno a uno los granos de arena que te habían ensuciado, teniendo que dejarte a veces para el dia siguiente. Compungido, triste, con una sensación de vacío en el estómago.

Recuerdo tu aspecto, tu color de siempre que me gustaba más que las otras formas quizás más sintéticas, quizás tu facilidad para amoldarte, tu aroma. Has cambiado en varias ocasiones en un intento de adaptarte a los tiempos, pero por dentro has seguido siendo la misma.

A ti que eres la memoria ya de varias generaciones y que has pasado de padres a hijos te rindo homenaje, porque eres dulce, buena, constante, imperturbable y siempre hemos podido contar contigo. Sigue así.

SOLUCIÓN:

La primera que lo dijo fué yoenmimundo, pero sé fehacientemente que lo sabíais todos, ¿no os da pena meteros con un niño con un ojo de cristal y fijación por el chupete?

02 febrero 2006

De arpías y mujeres

Por definición una arpía es una mujer aviesa y malintencionada que intenta sacar provecho de todo a costa de lo que sea, sin escrúpulos, fatua, manipuladora para conseguir sus fines, trepadora, que no duda en utilizar sus armas femeninas en su propio interés. Es calculadora, rapaz, mentirosa, amiga de crear situaciones farragosas que suelen producir daño a los demás. A menudo utilizan el sexo y la seducción con el único fin de conseguir sus propósitos.

Una mujer es aquella que pudiendo ser una arpía, por propia elección decide no serlo. Es capaz de luchar y subir por méritos propios sin triturar a nadie, es capaz de querer desinteresadamente, es desprendida, es valiente, es tenaz, comprende bien las situaciones y no las crispa. Cuando se rinde lo hace sin condiciones y cuando se entrega, se entrega y punto.


Dedicado al señor Nepomuk, para que vea que sigo siendo un pillín y a Wendyquerida, para que vea lo simple que soy.

01 febrero 2006

Por qué me gustan las mujeres

Me he puesto a escribir un post sobre un retrato, el retrato de una chica de la blogosfera, y pensando, pensando, he intentado extraer las causas de por qué me gustan tanto las mujeres, no sólo en el aspecto sexual, sino tambien en el intelectual.

He intentado muchas veces sin éxito convertirme en un misógino recalcitrante, pero esa misoginia me ha durado aproximadamente tres milisegundos, tiempo más que suficiente para ser desarmado por unos andares o una mirada, una voz, un comentario, o simplemente un silencio (qué fácil soy).

En general siempre me he comunicado mejor con las mujeres, suelen ser más intuitivas y con pocas palabras captan mejor el mensaje. Siempre he preferido trabajar con ellas porque suelen ser más currantas y mucho más resistentes, cumpliendo antes con su parte del trabajo, además no suelen ser prepotentes, y si algo no saben lo dicen, y si algo no entienden, preguntan. Son mucho más pacientes y suelen tener bastante claro lo que quieren.

Éstas son sólo algunas cosas que pienso sobre las chicas y que me gustan de ellas. Sin estos atributos normalmente no he conseguido sentirme atraído, por muy buenas que estuvieran.

29 enero 2006

Autochantaje, qué placer.

¿Quién no se ha sentido chantajeado alguna vez? Yo creo que todos, pues hay personas que son maestras en hacerte sentir que les estás estropeando la vida simplemente por el hecho de saludarlas por la mañana. Estos artistas de la oportunidad, estos llorones acostumbrados a salirse siempre con la suya, abundan en el medio facilón en el que nos movemos.

Pero hay alguien que es mucho peor que estos individuos abyectos y advenedizos que se aprovechan de que hay bastante gente por el mundo con sentimientos. Son aquellas personas que estúpidamente se hacen chantaje a sí mismas, soportando situaciones que si observaran desde fuera, se plantearían como absurdas e inviables en continuidad. Esta clase, a la que pertenezco, se autoalimenta engordando con el tiempo y consiguiendo cronificar situaciones que sería muy deseable enterrar si no fuera por la propia sensación de culpabilidad que ellos mismos se crean.

28 enero 2006

La cucaña

La vida es una cucaña, el premio parece ser que está al final y te esfuerzas en subir, intentando llegar a algo porque crees que esa es tu meta, porque te han dicho que eso es lo que tienes que conseguir, y caes una vez y otra, aun así sigues en tu empeño, aunque esté fuera de tu alcance, aunque sea algo que no te gusta.

Pero el verdadero premio está en la posibilidad de intentarlo.

24 enero 2006

Cosas que hubieran pasado si...

... no hubiera existido Homero.
  • Desde el principio se habría viajado más, porque lo de Ulises acojona a cualquiera. América habría sido descubierta por los romanos y el acueducto de Segovia estaría en Cincinnati.
  • Los bomberos no tocarían las sirenas, sino la gaita.
  • Cada dos por tres nos encontríamos una caja regalo tamaño frigorífico industrial con un lacito delante de la puerta, con dos o tres ocupas dentro, y la cogeríamos.
  • No sufriríamos constantemente el agravio comparativo de lo macizo que está Brad Pitt en Troya.
  • Los del ayuntamiento de Madrid no podrían decir por las mañanas lo congestionada que está la calle Telémaco.
  • Como la épica no existiría, el mio Cid sería un cantar por soleares.
  • Todos tendríamos nuestro talón de "jódete y baila" en vez del de Aquiles.
  • Los dioses olímpicos no se habrían picado intentando demostrar quién era el más enrollado con los humanos, y así no habrían aburrido al personal, que terminó pasando de ellos. Hombreporzeus.

Y en fin, todo seguramente sería distinto y no tendriamos que desconfiar de los griegos y de sus regalos. Y seguramente nos habríamos perdido el mejor duelo de la historia.

23 enero 2006

¿Es... son? - II

Me impresionó desde la primera vez que le vi, robusto pero tierno, a la vez exquisito e imprevisible. Adaptado a muchas situaciones y a muchos gustos.

Madrugador empedernido, fragante, musculoso, de piel tostada y brillante. Cuando supe su nombre me costó trabajo pronunciarlo, y cuando pregunté por él no me entendieron.

Desde ese primer día todas las mañanas pienso en él, la mayoria de las veces no está y cuando está no suele ser casi nunca el mismo. Pero yo no olvido esa primera vez que me dejó todas estas sensaciones.

SOLUCIÓN:

21 enero 2006

¿Es... son?

Va subiendo suave, sinuoso, como la cresta de una cordillera rectilínea que separa zonas yermas de una quebrada profunda y húmeda, culmina su ascensión en un doble arco tudor prominente y relleno de volumen, para volver a descender suave, simétrico, con esa tenue ondulación insinuante.

En el lado opuesto surge otra cresta como paréntesis tumbado, como barca de faraón, que también separa una abundante ladera en forma de collado que termina bruscamente, limitando por el sur la oscura grieta.

Ambas formaciones se van afilando desde el centro hacia los extremos. Son de color vivo, brillante, suculento, voluptuoso. En su superficie se dejan ver una serie de surcos que le dan a su huella un aspecto fluvial.

Conforman la antesala de lo oculto, lo desconocido, la puerta de entrada y de salida de todo cuanto terminamos o empezamos sabiendo, queriendo, ignorando, indagando, padeciendo, olvidando, sufriendo, conociendo, matando, viviendo, asustando, contando, descontando, reprochando...

¿De qué va esto... ?



El anterior retrato era el de Jelen. Acertaron Reve (que retoma su triunfal carrera) y Bélver.

19 enero 2006

Imaginando retratos - XVIII

La vi pasar fugazmente a mi lado, de repente desapareció de mi vista, pero su imagen quedó grabada en mi cerebro como a fuego.

Era una chica suma de otras muchas que había conocido, la síntesis, tesis y antítesis de mi concepto mental de mujer. Caminaba segura, con paso firme, decidida a hacerlo bien, conociendo perfectamente sus cometidos y sus prioridades, ocultando brillantemente sus suspiros, sus sueños, sus decepciones. Dando una y otra vez las mismas oportunidades, y una y otra vez viendo frustradas sus expectativas.

Tenía la cara de un día más, imperturbable, magnífica. Era delgada, llevaba un traje de chaqueta gris, sus piernas se movían de forma marcial pero elegante, enfundadas en unas medias negras. No me pude fijar en el color del pelo, pues sus ojos verdes mantuvieron toda mi atención.

Qué pena que la imagen fuese tan fugaz. He vuelto otros días a la misma hora y no la he vuelto a ver, me gustaría poder terminar su retrato.

18 enero 2006

Está bien, confieso

Estaba yo tan tranquilo sin haber roto un plato, y de repente se acercan dos guapas señoritas, una con cara de pocos amigos y otra con una dulce sonrisa (típica situación peliculera poli bueno poli malo) y me dicen:

- Eres sospechoso, ¿lo sabías?.
- ¿Qué?
- Sabes perfectamente de lo que estamos hablando, vamos, suéltalo.

Mientras echaban humo de cigarrillo a mis ojos, yo comencé a llorar, por el humo, claro, aunque he de reconocer que estaba bastante acojonado.

-Está bien, lo diré.

Primero -Me levanto una hora antes para darme un baño, relajarme y leer un poco, sé que es paradójico porque acabo de salir de la cama, pero si no lo hago estoy tenso el resto del día.

Segundo -Los dígitos de la hora de levantarme no pueden sumar ni trece ni cuatro, si ese día necesito tener suerte espero a que sumen ocho, nueve o quince, y pongo el pie derecho en el suelo primero.

Tercero - Siempre compro dos cosas de lo que sea, no soporto ir justo y dejar algo a medias por falta de material.

Cuarto - Llevo conmigo en un único llavero todas las llaves de mi vida, el llavero pesa más de un kilo y me está produciendo una rotura de bolsillos inveterada.

- Ya está.
- De eso nada, termina de desembuchar si no quieres saber lo que es bueno.
- De acuerdo, el quinto es llevar spray de pimienta y rociarlo sobre cualquiera que se me acerque preguntando lo que no debe...

Juro que no estoy en tratamiento (a lo mejor es por eso), releyéndolo parezco el de Mejor Imposible.



El retrato anterior era el de un servidor, han acertado papa pan que me lo ha dicho al oído, yo, y el que me dice que encienda las cerillas.